La transformación digital va más allá, mucho más allá y es mucho más compleja de diseñar, porque para realizar procesos de transformación digital de una compañía hay que tener una menta muy abierta y unos oídos muy finos. No son pocas las compañías donde los directivos no son digitales. Vaya por delante que ser digital no implica ser un adolescente ni estar etiquetado en ninguno de esos grupos de los que tanto nos gusta hablar, no es necesario ser millenial, ni pertenecer a la generación Z. Para ser digital hay que zambullirse de lleno en el nuevo mundo con la mente abierta.
Hace ya unos diez años, escuché en un congreso algo que me marcó profundamente, la frase lapidaria era algo así como: “señores, tenemos que estar preparados para sentar a nuestros clientes en el consejo de administración de la empresa”. Y hoy me atrevo a decir que eso es ser digital, porque la clave de la transformación digital no es otra que el individuo al que tratamos de dirigirnos (ya sea cliente o empleado).
Y es que la tecnología ha cambiado al cliente, a unos más y a otros menos, pero han cambiado, basta con tomar como ejemplo el uso que los mayores hacen de Facebook, donde los abuelos se conectan con los hijos, y los nietos aprenden a estar conectados con ellos vía Facebook (en los últimos años, los mayores de 65 años, son el grupo demográfico de mayor crecimiento en Facebook). ¿Magia? No, es la Sociedad de la Información, una sociedad donde el epicentro de todo es el individuo, una sociedad donde el modo de hacer las cosas cambia, ¿por qué sino compraría Facebook una empresa de 70 empleados por 22.000 millones de dólares? (por si aún no ha caído en la cuenta, estamos hablando de Whatsapp).
Cuando se produce un cambio profundo en los hábitos de comportamiento, podemos hablar de disrupción y esa es otra de las claves de la transformación digital: los individuos comienzan a hacer las cosas de otro modo y los modelos tradicionales se ven desplazados, ya no se trata de mover procesos transaccionales al canal online, sino de nuevas formas de hacer las cosas.
En Informática El Corte Ingles, somos conscientes de ello, y hemos transformado Conexflow, nuestra pasarela de pagos y uno de nuestros grandes pilares de conocimiento, adaptándola a este nuevo entorno que nos invade.
Porque la transformación digital golpea duro en el entorno de los pagos online, el crecimiento del comercio electrónico abre nuevas capacidades de negocio y nuevas necesidades. A los clientes ya no les basta con que sus transacciones sean seguras, aparecen nuevas necesidades, como garantizar que el producto comprado es el producto ofertado o pagar a plazos una compra con el móvil evitando procesos complejos de autorización.
El mundo del pago electrónico ha puesto foco en el cambio del modelo, alrededor de preguntas como ¿por qué cobrar mediante plataformas que se quedan parte de sus beneficios? ¿por qué pagar comisiones elevadas? ¿por qué depender de intermediarios? Un mundo en constante evolución donde la innovación es parte del ADN. Seguro que más de una vez ha oído la palabra Fintech, fruto de la fusión de la palabras Finance & Technology, y es que el mundo de las finanzas es uno de los polos de atracción más relevantes en el mundo de la innovación, dando lugar, entre otras muchas cosas, a nuevos modelos de pago y servicios asociados.
Conexflow PaymentHub es la evolución de la pasarela de pagos de Informática El Corte Inglés, un sistema que realiza más de 3.000.000 de transacciones diarias y que se encuentra operativo en más de 100.000 puntos de venta alrededor del mundo.
Un alto porcentaje del abandono de una compra online se produce debido a la complejidad del pago y a la falta de opciones de pago. Si nuestro mercado es internacional, el porcentaje se incrementa. Por ello, Conexflow PaymentHub ha sido diseñado para simplificar al máximo el proceso de pago en una única interfaz que pueda ser parametrizable según conceptos tales como el país de origen de la transacción o el importe. Así, podrá seleccionar qué medios de pago habilita para cada mercado y establecer los umbrales que determinan si usted permite realizar la transacción por ese importe con ese medio.
Y son los medios, los nuevos medios, los que realmente han revolucionado el mundo del consumo online. Ahora con Conexflow PaymentHub será posible pagar, siempre dentro de la misma interfaz y de modo transparente para su canal de venta, mediante domiciliación bancaria de sus pagos recurrentes (por medio de Besepa) o mediante transferencia, haciendo uso de las funcionalidades de Sofort, GiroPay, Safetypay o Trusly, compañías de este nuevo mundo FinTech que ya realizan millones de transacciones cada día.
Es posible, incluso, financiar sus servicios. Conexflow PaymentHub integra ahora el pago aplazado en 3, 4, 5 o 6 cuotas fijas mensuales gracias a la funcionalidad de “Paga+Tarde“. El proceso de autorización es inmediato y el límite de la operación lo pone la capacidad de compra del consumidor, ya no hay excusas para no disfrutar de esa estancia en el paraíso soñado.
Y como no podía ser de otro modo, Conexflow PaymentHub incluye integración con PayPal, alternativa a los métodos de pago tradicionales que no necesita presentación, cuya finalidad inicial no fue otra, que evitar las estafas en la venta online protegiendo la compra de artículos hasta 2.500 dólares. La integración con PayPal le dará acceso a transaccionar de modo seguro y por medio de la misma interfaz con más de 150 millones de usuarios en 190 países.
Seguimos trabajando e innovando para usted, y en la hoja de ruta de nuestro producto, hay muchas más sorpresas, le invitamos a que obtenga más información y descubra lo que podemos aportarle en este apasionante mundo en nuestro site:
http:// paymenthub.conexflow.com